Así, un 39 por ciento se declaran bastante preocupados, y un 11 por ciento muy preocupados, y son los jóvenes de 18 a 24 años (un 77 por ciento) y las familias numerosas (75 por ciento) los perfiles que sienten mayor inquietud, según el II Barómetro de la Vivienda de Grupo Mutua Propietarios.

Con ello, sólo un 39 por ciento de los extremeños afirman sentirse tranquilos ante la evolución de este asunto que se sitúa como una de las principales preocupaciones de los españoles.

De acuerdo con los indicadores de Grupo Mutua Propietarios, la mayoría de los extremeños (y de forma especial los colectivos vulnerables: jóvenes y aquellos con menores ingresos) se muestran escépticos ante el impacto de las políticas públicas en la vivienda y, por tanto, creen que no impulsarán una bajada del precio de los inmuebles.

En concreto, el 29 por ciento las considera contraproducentes, un 35 por ciento sin ningún efecto, y sólo el 10 por ciento admite que pueden ser efectivas y cumplir con su objetivo.

Por ello, un 42 por ciento de los extremeños se muestran pesimistas y prevén que el precio de la vivienda aumente durante 2025. Así, mientras que un 29 por ciento estiman que subirá entre un 5 y un 10 por ciento, un 13 por ciento apuntan a incrementos superiores al 10 por ciento. En contraste, sólo un 20 por ciento confían en que los precios se mantendrán estables.

De acuerdo con el II Barómetro de la Vivienda, los extremeños consideran que esta situación afectará a su vida diaria y que deberán realizar sacrificios para amortiguar los precios de compra o alquiler de su hogar.

Disminución de la capacidad de ahorro (45 por ciento); reducción del ocio y la vida social (28 por ciento) o cambio de residencia (19 por ciento) son las principales consecuencias que este mercado tensionado tendrá en los extremeños.

El informe del Grupo Mutua Propietarios apunta a la especulación y compra de propiedades con fines de inversión (43 por ciento) como la principal causa del aumento del precio de los inmuebles, seguida de la escasez de viviendas disponibles (26 por ciento), mientras que un 22 por ciento de los extremeños señalan a la intervención insuficiente del Gobierno para regular los precios como una de las causas principales.

En cuanto a los principales motivos del incremento de los alquileres, los extremeños apuntan a la imposibilidad de acceder a una vivienda en propiedad (30 por ciento); al incremento de viviendas destinadas al alquiler turístico (22 por ciento) y a la falta de políticas efectivas para regular los precios (25 por ciento).

Otros factores destacados incluyen la escasa protección jurídica ante impagos u ocupaciones (20 por ciento) y la inseguridad jurídica percibida por los propietarios (6 por ciento).