La consejera de Salud y Servicios Sociales, Sara García Espada, ha destacado este viernes la importancia de que el Ministerio de Sanidad haya accedido a la reivindicación de las autonomías para flexibilizar la acreditación de las unidades docentes.

Esto permitirá a las Comunidades Autónomas aumentar el número de plazas, haciendo especial hincapié en Medicina Familiar y Comunitaria, "apostando siempre por la calidad formativa", ha valorado García Espada durante la celebración del Consejo Interterritorial en Madrid.

La consejera ha reivindicado el regreso a la elección presencial para los profesionales sanitarios, recordando que es responsabilidad del ministerio, y ha expresado su crítica hacia la reticencia de la ministra a considerar la reducción de la nota de corte de los MIR, lo que, según García Espada, es un lujo que España no puede permitirse.

El pasado año, 202 plazas MIR quedaron sin cubrir. Los médicos que acceden al MIR ya han superado una rigurosa selección para graduarse en Medicina, y algunos de ellos quedan en el limbo de la especialización debido a una sola pregunta mal contestada.

Esta situación aumenta la incertidumbre sobre la especialización de los médicos egresados que no logran acceder a la formación especializada, y los impulsa hacia la sanidad privada como única salida profesional.