Venero ha explicado que la pretensión es lograr una transformación activa de los jóvenes, en la que son fundamentales las asociaciones y la acción colectiva, ya que el coronavirus nos ha puesto en alerta y hay que buscar respuestas colectivas y no individuales”.

Con esta iniciativa, buen ejemplo de innovación educativa, según el director general, se pretende impulsar el desarrollo de programas que permitan que la educación extremeña impulse la participación y el tejido asociativo en los centros educativos. De esta forma, las asociaciones de estudiantes se unen para lograr unos fines e integrarse más activamente en la comunidad escolar, logrando estar más informados, reivindicar sus derechos y colaborar en la obtención de una mejor calidad de enseñanza.

El resultado es una experiencia piloto con 12 centros educativos, cuyo número se ampliará en el curso 2021/2022, que contempla talleres iniciales, de elaboración de estatutos y de planificación anual, para que cada grupo de estudiantes que constituya su propia asociación vaya ganando autonomía hasta llegar a ser referente en su entorno. Las asociaciones se constituyen en centros públicos y privados que impartan enseñanzas de ESO, Bachillerato, Formación Profesional, y enseñanzas artísticas, deportivas, de idiomas y de educación de personas adultas, pudiendo ser constituida por cualquier estudiante.

Desde el CJEx, Olga Tostado ha manifestado el firme compromiso de fomentar la creación de asociaciones estudiantiles de la Comunidad Autónoma, ya que con ellas cientos de estudiantes podrán asociarse y defender sus necesidades e intereses, como parte importante e imprescindible de la comunidad educativa.

La Administración, a través de la Consejería de Educación y Empleo, acompaña en el proceso de planificación de un Plan de Impulso a la Creación de Asociaciones de Estudiantes en Extremadura, para que se mantengan en el tiempo y, año tras año, los estudiantes tengan un espacio desde el que ejercer una ciudadanía activa.

El objetivo general es crear o reactivar asociaciones de estudiantes de la región, formar a los jóvenes en ámbito de la participación estudiantil, promover la participación estudiantil de manera práctica y real en el entorno de la educación formal, y formar a los jóvenes en ámbito de la participación estudiantil.

Asimismo, dar visibilidad a las asociaciones de estudiantes en Extremadura, mostrar las acciones que realizan, facilitar el entendimiento de los trámites administrativos, promover la participación activa de los estudiantes en su centro escolar y capacitar a los jóvenes para que conozcan y reivindiquen sus derechos en el entorno escolar.

Olga Tostado ha explicado que este proyecto comprende tres fases diferenciadas, que son contacto y selección de los centros, formación online y acompañamiento. Para la fase de formación se plantearán tres talleres online, en torno a los cuales se estructura el proyecto.

En el primer taller se presentarán las asociaciones estudiantiles, sus funciones y posibilidades, así como la diferenciación con respecto al resto de asociaciones; en el segundo se expondrán las necesidades administrativas y pasos a seguir para la constitución o reactivación de las asociaciones estudiantiles, con un y posteriormente se realizará un seguimiento para facilitar su creación, que en el tercer taller, una vez creadas las asociaciones, se incluirán contenidos sobre cuestiones de organización, planificación y logística de las distintas acciones que se quieran plantear.