El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil de Badajoz ha desmantelado un matadero clandestino situado en una antigua nave cerca de Magacela (Badajoz), en el que sacrificaban animales en instalaciones no autorizadas, para su posterior venta en carnicerías de la comarca de Vegas Altas.
En el marco de las investigaciones que el Seprona realiza para detectar actividades relacionadas con el sacrificio de animales en lugares no autorizados, pudo ubicar una antigua nave en el término municipal de Magacela donde se criaba ganado porcino y "según necesidades de venta, se sacrificaban en las mismas instalaciones", que "no dispone de las condiciones higiénicas determinadas por la Ley para el sacrificio y despiece de estos animales".
Señala la Guardia Civil en nota de prensa que a finales del pasado mes de julio, el Seprona de Don Benito, observó cómo se transportaba carne, desde la citada nave hasta un centro de distribución, y tras la inspección del furgón, que también carece de las condiciones para el transporte de este tipo de mercancías, los agentes hallaron carnes del despiece de tres cerdos, un lechón integro y las vísceras.
Además portaban varias bombas de gas, un contenedor con quemadores y de diferentes herramientas utilizadas para el despiece de los animales.
En esos momentos se pasó aviso al Servicio Extremeño de Salud del Gobierno de Extremadura, quién levantó las correspondientes Actas y decretó la eliminación de las carnes, por no poder acreditarse su trazabilidad sanitaria y por tanto no poder ser consideradas aptas para el consumo.
En unión de los Veterinarios, la Guardia Civil inspeccionó detalladamente las instalaciones usadas como matadero, donde se hallaron dos corrales con siete cerdos vivos, además de una sala prevista con sistemas de vigas metálicas, poleas y cadenas para colgar los cuerpos de los animales para sacrificarlos y desollarlos, mesas metálicas para el despiece, ganchos en las paredes y sistemas de toma de agua y desagüe de aguas residuales.
Ante lo expuesto, la Guardia Civil instruyó diligencias dirigidas a la Autoridad Judicial, bajo el concepto de delito contra la salud pública, también fueron confeccionadas distintas infracciones administrativas dirigidas tanto a la Autoridad Sanitaria, como a la competente en bienestar animal por el supuesto sacrificio animal irregular.
Actualmente, la Guardia Civil continúa las gestiones encaminadas a conocer el volumen de animales sacrificados, carne comercializada y destino final de éstas.