El convenio ha sido firmado por el presidente de la Diputación, Miguel Ángel Gallardo, y el Arzobispo de la Archidiócesis de Mérida-Badajoz, Celso Morga. En este caso, ambas instituciones son conscientes de la necesidad de conservar los edificios religiosos de la provincia, en cuanto constituyen una parte importante de su patrimonio histórico y cultural, a la vez que realizan una encomiable función social.

El mismo convenio ya se firmó entre ambas partes y por las mismas cantidades en los años 2018, 2019 y 2021 y ahora se ha renovado. Por su parte, en 2020, con motivo de la pandemia, se concedió una subvención directa por parte de Cultura de 50.000 euros.

Durante ese periodo y desde 2018 se ha actuado en 35 templos de la provincia, incluyéndose también bienes muebles como los retablos o imágenes, que también son de suma importancia por lo que supone de conservación patrimonial.

Habida cuenta del estado de deterioro y necesidades constructivas de dichos edificios, las dos instituciones desean aunar esfuerzos para financiar las obras de reparación y mantenimiento del mayor número posible de edificios parroquiales de forma coordinada.

Miguel Ángel Gallardo ha precisado que existe un “ingente patrimonio en Extremadura y en muchos pequeños pueblos las iglesias y las ermitas son sus edificios más importantes”. De hecho, el presidente manifiesta que durante sus visitas por toda la provincia son los propios alcaldes los que le muestran su preocupación por el estado que presentan algunos edificios parroquiales, que ahora podrán ser objeto de estas actuaciones de conservación y reparación de templos parroquiales. 

Unas obras que se pueden hacer en edificios de municipios de menos de 20.000 habitantes o entidades locales menores de la diócesis de Mérida-Badajoz, siempre que no estén declarados de interés cultural o tengan expediente de declaración incoado a tal fin. 

La Diputación de Badajoz comparte la necesidad de restauración y conservación del patrimonio eclesiástico de la provincia, ya que “también forma parte de las tradiciones y de la riqueza patrimonial y constituyen otro de los importantes atractivos turísticos con los que cuenta el ámbito rural”. Además, en la mayoría de los casos “se trata de edificios o elementos con gran valor sentimental para los vecinos de las distintas localidades de la provincia”.

Para el presidente provincial “realzar el patrimonio de la archidiócesis es realizar el patrimonio de la provincia”. 

En la misma línea se ha mostrado el Arzobispo, Celso Morga, que se ha felicitado por “este gran convenio que sirve para la recuperación y embellecimiento de templos parroquiales”.

Éste ha incidido en la vertiente cultural que se desprende del presente convenio pues, como ha recordado, “todo lo que es objeto de culto es fuente de cultura”. El mismo tendrá la vigencia de un año, hasta el 30 de septiembre de 2023.

El estudio y selección de las obras a financiar con cargo a los fondos que se arbitran a través del presente convenio se realizará por una comisión mixta, integrada por dos representantes de cada una de las instituciones firmantes.  Será esta comisión la que determine las actuaciones y obras a llevar a cabo. En este caso, las actuaciones de conservación y reparación se seleccionarán teniendo en cuenta, entre otros, varios criterios: la gravedad de los daños, estado de conservación, urgencia y necesidad de actuación, función de los centros, etcétera...