La solidaridad de una empresaria local, Ana Resmérito, ha permitido que pueda donarse a la junta local de la AECC todo el dinero recaudado en una rifa organizada por ella misma. Casi 800 euros que se han enviado a la provincial para destinarlo a investigación y al mantenimiento de los servicios que presta la asociación.

Ana Resmérito, que regenta un puesto de golosinas en la plaza Grande, explicó que a nivel personal le ha tocado de manera dura el cáncer, pero además estaba muy preocupada porque salió en los medios de comunicación que las mujeres con cáncer de mama no estaban recibiendo toda la atención necesaria debido al Covid. Así que decidió encargar unas papeletas, compró una moto eléctrica, hizo una gran cesta de chuches y organizó una rifa con papeletas a 1 euro. Todos los beneficios, de casi 800 euros, se han entregado a la junta local de la AECC.

Y precisamente una voluntaria de la asociación, que quiso colaborar comprando papeletas, ha sido la agraciada con el premio. Se trata de Ángela Morán, que se ha  mostrado muy agradecida por el gesto que ha tenido la empresaria con la asociación y contenta también por la suerte que ha tenido. El regalo ha sido para su nieto.