Vara aboga por una posición de acuerdo y consenso en la negociación de la Política Agraria Común

El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara ha abogado este viernes por una posición de acuerdo y consenso en la negociación de la financiación de la Política Agracia Común.

El jefe del Ejecutivo autonómico ha realizado estas declaraciones en Mérida, donde ha clausurado el Foro Agrario que ha organizado APAG Extremadura ASAJA.

“Es importante mantener una posición fuerte y unida en la negociación de la PAC y que no haya diferencias para luchar por el mantenimiento de los fondos”, ha subrayado, al tiempo que ha advertido de que "las diferencias siempre le vienen bien a Bruselas".

Fernández Vara ha indicado, sin embargo, que “vamos ajustados” para consensuar esta posición y que los reglamentos y procedimientos deberían estar listos antes de mayo del año próximo, fecha prevista para celebrar las elecciones europeas, unos comicios que ha considerado decisorios “porque el Parlamento Europeo es corresponsable ahora de las decisiones con la Comisión Europea”.

Asimismo, el presidente ha subrayado que la PAC es una de las herramientas clave en la lucha contra los problemas demográficos y la despoblación.

“Si la gente del campo tiene unas rentas suficientes, podrá desarrollar su proyecto de vida y de subsistencia en las zonas rurales; de lo contrario, se unirá a las migraciones masivas desde lo rural a lo urbano que están sucediendo en muchos lugares de Europa”, ha aseverado.

Por ello, ha considerado de especial importancia el relevo generacional en las explotaciones agrarias, añadiendo que en la actualidad solo el 10% de los agricultores y ganaderos tienen menos de 40 años. “Los datos son contundentes, ha sentenciado, por lo que si queremos que el campo sea una oportunidad de vida para las generaciones venideras tiene que ofrecer rentabilidad para que puedan vivir con dignidad”.

Por otro lado, el presidente ha incidido en la apuesta de su Gobierno por las políticas de aseguramiento en un momento en el que las consecuencias del cambio climático, como los periodos de sequía o las lluvias torrenciales, afectan negativamente al sector.

Por último, ha realizado una defensa de la representatividad y ha abogado por la importancia de las organizaciones agrarias como interlocutores necesarios con las administraciones para resolver los problemas del sector.