Un total de 131 estudiantes ciegos o con discapacidad visual grave de Extremadura regresa en estos días a las aulas junto al resto de compañeros, ante lo cual la ONCE ha recordado la necesidad de que "las nuevas tecnologías docentes sean accesibles para no quedar excluidos de algunas materias".
Para ellos, la ONCE pone en marcha un sistema integral de apoyo, que contempla al alumnado, los centros escolares y las familias con el objetivo de que su incorporación se realice en igualdad de condiciones.
Según los datos que aporta la ONCE en nota de prensa, el 99,6 por ciento de estos estudiantes se escolariza en centros educativos ordinarios "respondiendo al principio de una enseñanza inclusiva", que es posible "gracias a su esfuerzo y la colaboración y el apoyo específico de los equipos de la ONCE y de las Administraciones educativas".
Así, esos 131 alumnos con ceguera y discapacidad visual grave se reparten de cara al nuevo curso 2017/18 entre los diferentes niveles educativos, de tal forma que 30 escolares comienzan la Educación Infantil; 26 están escolarizados en Educación Primaria; 18 han llegado a la Educación Secundaria Obligatoria; 7 cursan Bachillerato; 5 se preparan en la Formación Profesional; 11 se enfrentan a la Universidad; y 34 están inscritos en otro tipo de enseñanzas.
Señala la ONCE que la inclusión del alumnado con ceguera y discapacidad visual en un ámbito educativo normalizado "responde a lo indicado en la legislación vigente", donde existe un único sistema en el que "prevalece el derecho de cualquier alumno a recibir una atención educativa equitativa y de calidad, respetando sus necesidades específicas para posibilitar su plena inclusión educativa y social".
De ello se encargan los profesionales que componen los equipos específicos de atención educativa a personas con discapacidad visual, formados gracias a sucesivos convenios de colaboración entre la ONCE y las Administraciones educativas.
Estos equipos trabajan intensamente para "planificar el conjunto de intervenciones que van a llevar a cabo durante todo el curso escolar" con el fin de facilitar a este alumnado, su profesorado, centros y familias, los recursos humanos y materiales, así como otro tipo de apoyo que necesiten para facilitar su aprendizaje y conseguir una plena inclusión, base de su inserción laboral futura.